martes, mayo 23, 2006

El Periódico- Montenegro se proyecta sobre el debate territorial en España


LA REFORMA ESTATUTARIA // EL REFERENTE EUROPEO
Montenegro se proyecta sobre el debate territorial en España

Según Solana, raya el "delírium trémens" invocar este modelo para las autonomías



ENRIC DURAN
BARCELONA

Desde "sana envidia", pasando por "enorme error" y llegando a "delírium trémens". La reciente aprobación en referendo de la independencia de Montenegro con respecto a Serbia y una posible traslación al territorio español ha supuesto para unos la cara y para otros la cruz. La que será nueva república balcánica se sitúa en el horizonte estatutario de los nacionalistas e independentistas vascos y catalanes y en anatema para los conservadores españoles.

"El referendo nos produce una sana envidia democrática", afirmó ayer el líder de Esquerra, Josep Lluís Carod-Rovira. "En lugar de decidir de forma vergonzosa en referendo si se acepta un Estatut recortado, el pueblo de Montenegro ha podido expresar con libertad si quiere ser o no un país independiente", destacó. El portavoz republicano, Joan Puigcercós, preguntará a José Luis Rodríguez Zapatero en el Congreso qué opinión le merece que las autoridades serbias hayan reconocido el derecho a decidir de los montenegrinos tras el referendo.
"La autodeterminación es un derecho de los ciudadanos, por encima de cuestiones historicistas", remachó el consejero de Justicia del Gobierno vasco, Joseba Azkarraga (EA), que añadió que espera que la sociedad "más pronto que tarde" pueda pronunciarse en Euskadi.


EQUIVOCACIÓN
El secretario general del PP, Ángel Acebes, no desaprovechó la ocasión para afirmar que el nuevo Estatut catalán persigue "un modelo confederal" como el que tenía hasta ahora Montenegro con Serbia. Trasladar a España una situación como esa es "una utilización equivocada, errónea y manipulada" para el dirigente popular.
El alto representante para la política exterior de la UE, Javier Solana, intentó zanjar el debate y no se andó con matices. "Raya en el delírium trémens" cualquier comparación entre el referendo de Montenegro y el debate territorial español.


DISCREPANCIA
Más prudente fue el secretario de organización del PSOE, José Blanco, quien dijo que el partido respetaba el resultado del referendo montenegrino, pero su correligionario en Euskadi Rodolfo Ares reclamó a los nacionalistas vascos que se dejen de comparaciones y se preocupen por consolidar la paz en el País Vasco.

lunes, mayo 15, 2006

El País.- ETA aprende a hablar

EDITORIAL


ETA aprende a hablar


EL PAÍS - Opinión - 15-05-2006


Hubo un tiempo en que ETA difundía pocos comunicados, uno cada muchos atentados. En el último periodo, desde que no mata, difunde muchos. La regla vale también para la longitud de las entrevistas. Dieciséis páginas de periódico, entre las versiones en euskera y castellano, ocupaba la publicada ayer en el diario Gara. Como es difícil llenar tantas páginas con ideas nuevas, los encapuchados se copiaron a sí mismos y repitieron lo ya dicho en el último Zutabe, su boletín, en el que antes publicaban las reivindicaciones de los atentados y actualizaban las amenazas y ahora vierten sus reflexiones sobre temas políticos.

Desde luego, es mejor que hagan esto a lo de antes, pero ¿no hay una cierta incoherencia en que una organización armada diserte tan profusamente sobre asuntos políticos en una entrevista en la que comienza por reconocer que una cosa es la negociación de ETA con "los Estados", y otra la de "los agentes" políticos, o sea los partidos, sobre el "futuro de Euskal Herria"? ¿A qué viene que una banda terrorista amoneste a los partidos y les diga lo que tienen que pensar y hacer, y lo que tienen que negociar? ETA carece de cualquier representatividad, y su brazo político, en sus diferentes encarnaciones, ha obtenido, en promedio, en las ocho elecciones autonómicas celebradas hasta el momento, el 15,37% de los votos en Euskadi, y porcentajes muy inferiores en los otros territorios que reivindican. No es suficiente para hablar en nombre de los vascos o de Euskal Herria. Dice ETA que la clave es el compromiso de respetar lo que los vascos decidan. Pero es ETA quien no ha respetado lo que los vascos llevan muchos años decidiendo.

Los encapuchados están ahora ensayando un discurso político que justifique el alto el fuego. A tal fin, sostienen que si han podido dar ese paso es porque, gracias a su lucha (eufemismo para referirse a actuaciones como la de poner bombas en supermercados), lo que antes defendía la izquierda abertzale en solitario es ahora asumido "por muchos agentes y partidos", en referencia a los nacionalistas. Pero, entonces, ¿por qué critican tanto a Ibarretxe y, aún más, a Imaz?

Están aprendiendo a hablar sin bombas y la falta de costumbre les lleva a tomar sus convicciones (o creencias) por derechos indiscutibles, que los demás deben limitarse a reconocer: su programa soberanista, por supuesto, pero también el derecho a vivir a costa de la extorsión, porque "la lucha de liberación continúa" y ello acarrea "necesidades, incluidas las económicas". La coacción de cuadrillas de acoso (que incendian ferreterías de concejales) es "la manifestación del enfado y la respuesta popular"; y una condición para que el proceso avance es que "cese la represión", es decir, la aplicación de la ley a quienes cometen delitos.Pronto se cumplen tres años sin muertos, y ese dato objetivo es el principal argumento para confiar en que el alto el fuego sea irreversible. Seguramente, los jefes de ETA dudan todavía y por eso tantean las resistencias (del Gobierno, los partidos, la opinión pública) a sus pretensiones. Mañana se cumple un año de la resolución del Congreso. La respuesta de los firmantes debe ser (ésa fue la tónica de sus reacciones ayer) reafirmarse en lo entonces votado: que la condición para que haya un proceso de diálogo con ETA es que la banda acredite antes su voluntad de retirada sin vuelta atrás y que no habrá contrapartidas políticas.